Rubén Blanco ha llamado la atención de muchos clubes este verano. Desde Inglaterra y España se han fijado en el joven portero del Celta, que anteayer debutó con el primer equipo en el trofeo Cidade de Vigo, el día de su 17 cumpleaños. El principal interesado es el Manchester City que ha tratado en las últimas fechas de hacerse con los servicios del guardameta vigués para reforzar, en primera instancia, las filas del filial del club británico, según fuentes cercanas al futbolista.
El canterano podría, de esta manera, volver a encontrarse con el también excéltico Denís Suárez, que abandonó el Celta en el 2011 para vestir otro celeste, el del City. En principio, no parece cercano un acuerdo entre los Sky Blues y Rubén Blanco, ya que, según las mismas fuentes, motivos familiares alejan a las dos partes. La razón de fondo puede estar en el interés de los padres del joven en trasladarse con él a Manchester, donde no tendrían un empleo garantizado.
El portero todavía tiene contrato en vigor con el Celta, según recuerda su representante, Eladio Pereira, y todavía «no se ha formalizado ninguna oferta» al club de Balaídos. De todas formas, el interés existe y su representante reconoce que «hay ofertas de clubes para que Rubén juegue en la máxima categoría, pero no puedo concretar nombres. Es un asunto que debe tratar el club».
El guardameta, internacional con la selección sub-17, puede ver con buenos ojos vestir otros colores la próxima temporada. Por un lado, el filial celeste disputa la Tercera División y, por otro, a día de hoy sus minutos con el primer equipo son una quimera, sobre todo tras el fichaje de Javi Varas y la competencia de Sergio. El joven portero corre el riesgo de estancarse ante las dos alternativas de las que dispone el Celta y puede dar el salto a otro equipo en busca de minutos en una categoría más competitiva.
La Voz de Galicia
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